El clamor del silencio

martes, septiembre 26, 2006

Despreciando la soledad...

Esas veces que uno esta en lo más profundo de un hoyo sin salida, oscuro y frío como la cueva de lobos en la que nunca quisiera estar; triste y abandonado como el cementerio lleno de lágrimas que en algún día lejano podría visitar; tenebroso y horrible como sólo la maldad oculta en las personas...
En esas ocasiones uno cree estar acabado, solo y sin salida; pero siempre llega esa mano, ese espíritu que hace aparecer de nuevo la luz del sol y el trino de los pájaros; esos son los amigos que nunca dejan a un amigo a la deriva y que siempre se cuenta con ellos para despreciar la soledad...

"Au revoir"