Con la espada en la mano...

Con la imaginación hasta el borde de la locura, la alegría fugaz y el regocijo interior, me doy cuenta de que en la vida uno puede estar con la espada en la mano...
A que me refiero con estos pensamientos vagos y confusos, constantemente volátiles y que al parecer no tienen sentido: a que uno decide cuando blandir la espada para cortar, cuando puede usarla para defenderse así mismo y a los demás, cuando cruzar por las lúgubres veredas llenas de oscuridad...
Suena confuso y revuelto, como las olas del mar en plena marea que se estrellan contra la costa cambiando las arenas del mar de un modo azaroso, pero que le voy a hacer, cuando no se me ocurren muchas cosas que escribir y divago por los truculentos caminos de la memoria...

"Au revoir"